Juan Felipe Rubio,
Narrador de historias

En el amplio mundo de la fotografía, donde cada imagen cuenta una historia, hay personas que se destacan por su habilidad para capturar la esencia y transmitir emociones a través de sus capturas. Una que ha logrado hacerlo de manera brillante es Juan Felipe Rubio.

Publicista de profesión y fotógrafo por vocación, Juan Felipe ha sentido una pasión desde joven por narrar historias a través de su cámara. Su amor por esta disciplina va más allá de capturar momentos estáticos; busca adentrarse en el ser de las personas, revelando su esencia de manera singular. Sus imágenes representan un viaje que invita al espectador a explorar el mundo de sus sujetos, comprender sus vivencias y sentir sus vidas.

La música como fuerza motriz

La música tiene el poder de mover el alma, y él ha sabido aprovechar este poder en sus fotografías de eventos musicales. Al cubrir conciertos y festivales de música en distintas partes del mundo, logrando transmitir la energía y la emoción del sonido en vivo.

Keith Richards
Keith Richards

Mi epitafio bien podría decir:
"Siempre estuvo en la foto, aunque nunca salió en ella".

El ciclismo como inspiración

Una de las características más notables de su trabajo reciente es su amor por el ciclismo. Este deporte ha sido una fuente constante de inspiración desde niño, y ahora en su carrera, ha logrado capturar su esencia de una manera única. Sus imágenes transmiten la pasión y la dedicación de estos deportistas, mostrando la belleza de los paisajes y la intensidad de las competencias.

Preguntas y respuestas

¿Qué te motiva a contar historias a través de la fotografía?

Siempre he pensado que crear es una parte fundamental del ser humano y esta es mi forma de hacerlo. Mis creaciones las he denominado como “patrimonios visuales”. La fotografía es una forma de viajar al pasado, nos transporta al momento en que fueron hechas, y soy un fiel creyente de que las fotos traen consigo elementos adicionales a lo visual como: olores, sabores, sonidos, etc. Si bien estos elementos son más latentes para las personas que protagonizan las fotos (a través de sus propios recuerdos), también emergen para quienes no hicieron parte del momento, pero que refuerzan el contenido de las imágenes con su imaginación.

Estoy consciente de que las fotos se valorizan con el paso del tiempo y por eso no me preocupa tanto la inmediatez de las redes sociales, donde todo se desecha casi de inmediato, sino que más bien me gusta dejarlas madurar y sueño con las personas que las verán meses, años o décadas después de haber sido realizadas, y las apreciarán por su valor histórico, más allá incluso de su valor estético.

Un lugar preferido para tomar fotos..

Allá afuera. Esto suena muy genérico, pero tengo la fortuna de que mi lugar de trabajo cambia todo el tiempo y solo podría definirlo como “allá afuera”: en la calle, el campo, o donde sea.

Ahora, si tuviera que elegir un lugar específico, diría que la subida al Alto de Letras, entre Mariquita y Manizales, donde se atraviesan casi todos los pisos térmicos y paisajes de nuestro país.

Una canción que te recuerde un lugar..

Eres, de Café Tacvba, me lleva al Festival Cordillera de 2022 en el Parque Simón Bolívar. Tengo un recuerdo muy fuerte de la despedida de Camilo Rozo, un gran amigo, colega y líder del Smile Team, uno de los mejores equipos de trabajo en los que he estado, y con el que hemos cubierto el Festival Estéreo Picnic desde su segunda edición hasta la actualidad. Rozo se iba a vivir a España y estábamos junto a Manuela Uribe y David Micolta, absolutamente absorbidos por el show, sintiendo mucha nostalgia de saber que esos eran quizás los últimos minutos de una década de trabajo juntos. Al final de la canción nos abrazamos llorando; no siempre se tiene consciencia de cuándo se está viviendo algo por última vez, y creo que en ese momento todos compartimos ese sentimiento.

¿Cuál ha sido tu mejor descubrimiento (lugar)?

Colombia, cruel y hermosa al mismo tiempo. Desde niño tuve el privilegio de conocerla por carretera de la mano de mis papás. A pesar de haber recorrido bastantes kilómetros y regiones durante esa época, y después de haber tenido la oportunidad de visitar otros países, mi curiosidad sigue encontrando cosas sorprendentes y maravillosas en nuestra diversa tierra, así que Colombia no deja de ser mi mejor descubrimiento.

¿Qué te atrae de un tema para que pueda convertirse en un sujeto fotográfico?

Me atrae la idea de “lo irrepetible”, aquello que se va dando por la suma de muchos factores, ocurre una vez y ya jamás volverá a ocurrir de la misma manera. Asimismo me interesan mucho las personas y sus relaciones con sus oficios, lugares y otras personas, especialmente cuando siento que les mueve una profunda pasión. Yo mismo soy un gran apasionado por mi oficio, y creo que la energía que pongo a las cosas que hago queda en ellas, así que me siento identificado cuando veo esto mismo en los demás. Además de esto, congelar un lugar o una persona en el tiempo me permite después observar los cambios que ocurren con sutileza, pero terminan siendo radicales con el paso de los años.

¿Cuál es el proyecto fotográfico que más te ha conmovido o te ha dejado una impresión duradera?

Grabé un corto documental sobre la adopción de un niño de meses. Visité la fundación donde lo cuidaban, conocí a sus niñeras y enfermeras, y especialmente el momento en que este niño se encontró con sus padres adoptivos fue extremadamente emotivo y poderoso. Yo mismo me vi en problemas para enfocar la cámara entre lágrimas cuando ocurrió este encuentro. Es una pieza audiovisual que no es pública, pero que revisito cada tanto para llenarme nuevamente de la energía tan especial que viví ese día.

Dentro de unos años, cuando ese niño se convierta en mayor de edad, recibirá ese cortometraje como regalo de bienvenida a la adultez y sueño con que él se sienta agradecido, no conmigo, sino con su madre biológica, las personas que lo cuidaron, y sus padres que lo anhelaban y acogieron con tanto amor para empezar a formar su proyecto familiar.

¿Cuál o cuáles son tus proyectos futuros o metas como fotógrafo?

Incluso después de casi 20 años de vivir de la fotografía, sigo entendiendo cosas sobre lo que hago, así que actualmente estoy relanzando mi marca personal, enmarcada en la idea de que soy fotógrafo de lo irrepetible. Encontrar este concepto me ha llevado a definir aún más la intención de mi trabajo.

Sigo fortaleciendo mi proyecto de fotografía de matrimonios, Efe Uno Dos, buscando nuevos talentos con los que colaborar y celebrar el amor.

También hago parte de un colectivo de fotografía de ciclismo que se llama La Vuelta es Así, con el que buscamos exponer aspectos positivos de nuestro país, a través de la documentación de carreras de ciclismo profesional. Por medio de las historias que contamos nos interesa mostrar la belleza y variedad de los paisajes y subculturas colombianas, así como las luchas de los y las ciclistas, y su resiliencia para afrontar todo tipo de adversidades, no solo topográficas, sino también políticas y sociales.

El trabajo de Juan Felipe se destaca también en otras áreas con enfoque editorial, institucional, eventos corporativos, sociales y académicos. Lo puedes encontrar en:

Instagram: @irrepetible.co / @lavueltaesasi@efeunodos / @rubio_buitrago
Website: www.irrepetible.co / www.lavueltaesasi.com / www.celebramoselamor.com/rubio

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