En el corazón de Colombia, específicamente en Honda, se erige Morada Rosada, una casona que sirve como testigo silente de siglos de historia y transformación. Este lugar, construido hace cientos de años, ha sido hogar de diversos residentes y ha desempeñado múltiples roles a lo largo del tiempo, convirtiéndose en un símbolo de la rica herencia cultural que caracteriza a esta región.
Entre calles adoquinadas, se alza la casa que no es simplemente un refugio, sino un espacio dedicado a resaltar los oficios y el arte, abriendo sus puertas tanto a locales como a extranjeros por igual. Sin embargo, más allá de esos propósitos, la casa en sí misma es un organismo vivo, una extensión palpable de su dueña, Lina Restrepo, quien ha decidido preservar conscientemente la esencia de su morada. Para ella, cada rasgo distintivo del lugar representa un capítulo de su historia personal.
Conservar estas características no solo es una forma de respetar el pasado, sino también de honrar la autenticidad que emana de cada rincón. La acumulación de estas huellas revela una rica narrativa de transformación, adaptación y valentía. Representa la capacidad de soltar lo que ya no tiene significado y abrazar nuevas experiencias. Cada capa de pintura desgastada, cada grieta en las paredes, cuenta una historia que va más allá de lo que se puede ver a simple vista.
Después de estar muchos años deshabitada, Morada Rosada abre sus puertas en febrero de 2022 con una exposición de arte joven del Museo de Río Magdalena, titulada “Retornar para Sobrevivir” que marcó el renacimiento del lugar. La colaboración de Lina con el Museo del Río Magdalena y su director Germán Ferro ha propiciado la realización de varios conversatorios, residencias y talleres, compartiendo escenarios y experiencias enriquecedoras.
El alma de la casa se manifiesta de manera palpable gracias al empeño de Lina. La cuidadosa selección de las exposiciones revela la pasión y el rigor de su dueña, quien concibe este espacio como un lugar para la creación, la transformación y el cuidado. Morada Rosada es hoy un escenario donde convergen historias, conversatorios, residencias temporales de artistas, exposiciones, talleres, muestras de arte, orfebrería y cerámica. Cada evento es una pieza de un rompecabezas cultural que contribuye a la riqueza de la experiencia en este lugar único que resalta la belleza en su realidad más simple.
La casona, transformada en un escenario para el arte y la creación se convierte en el lugar perfecto para diversas manifestaciones culturales. Es un espacio que ha sido testigo de importantes eventos como El 46 Salón Nacional de Artistas “Inaudito Magdalena”, Magdalena Río Manifiesto, talleres experimentales de cerámica y papel, el Taller de dibujo y escritura con la Libretería Ediciones, la exposición Retornar para sobrevivir, entre otros no menos importantes, sirviendo como lugar de encuentro y reconocimiento de artistas.
Actualmente está expuesta una muestra de alfarería que ilumina la Morada Rosada con la riqueza histórica y simbólica de este oficio. En esta exhibición, las múcuras, ollas, urnas, vasijas y otros objetos no solo se presentan como simples receptáculos para contener, sino como portadoras de un profundo simbolismo, en una conexión intrínseca con la creación y la continuidad de la vida.
“Barro Madre” nos invita a explorar la magia inherente a estas formas de cerámica, donde cada pieza trasciende su función práctica para convertirse en un testimonio visual de la relación entre el barro y la forma.
La exposición presenta una variada selección de piezas, destacando la contribución de alfareros tradicionales y contemporáneos. Artistas como María Cano, Edwina Jaeger, Miguel Ángel B. Torres, María De los Santos Aislanth Rodriguez, Celia María Molina Hernández, Temilda Molina Hernández, Elizabeth Pérez Garzón, María del Carmen Prada Rodriguez, Bernardita Ortiz Alquichirre, Ana Felicia Ortiz Alquichirre, Laureano Melo y María del Carmen Mendieta, provenientes de diversas regiones del país, compartirán sus interpretaciones únicas, fusionando la herencia cultural con la expresión contemporánea.
Esta exposición celebra la continuidad de una antigua tradición y la creatividad de aquellos que, con sus manos, moldean no solo objetos, sino también conexiones profundas con nuestra historia y cultura.
Morada Rosada se establece como un testimonio tangible de la conexión, la colaboración y el intercambio cultural, siendo un lugar donde convergen historias y el arte se convierte en un puente. Estratégicamente ubicada en la zona colonial de Honda, es un destino imperdible para aquellos que buscan sumergirse en la creatividad y la belleza que este hermoso lugar tiene para ofrecer.
Encuentra a Morada Rosada en:
Instagram: @moradarosada
Todos los derechos reservados, prohibida la reproducción total o parcial de las imágenes
